Hola, bebé! Qué lejos estamos y qué cerquita te siento, pequeñajo. Familia aún antes de nacer, sangre elegida, hilos kilométricos que ninguna linea de ave puede cortar, sino unir alguna que otra vez. Ojalá tenerte más cerca físicamente para poder achucharte de vez en cuando, y verte crecer sin pantallas de por medio, mi dragoncito, que por mucho que andes en la capital, tu sangre tiene tintes condales y la fuerza de un dragón.
No sabes la suerte que tienes, Martín... Porque un reguero y mundo y medio de gente, ahora mismo, está deseando conocerte y darte la bienvenida a sus vidas. Y no, no sabes la suerte que tienes, porque has ido a venir a una ciudad preciosa, llena de oportunidades. Pero más aún te digo, que no sabes la suerte que tienes, Martín, porque has nacido con una mamá y un papá que te adoran, que son buenas personas y que van a cuidarte, a protegerte y a acompañarte en esta aventura que es la vida.
Bienvenido, pequeño dragón. (Ya)Te queremos muchísimo.
-16/08/2025-
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar en Entalpías y hacerlo con respeto. ¡Que tengas muy buen día!