viernes, 19 de diciembre de 2014

Abrigos por Navidad

La nieve bajaba jugando a no caer, en un suave balanceo. A lo lejos, una luz se adivinaba cálida, un candil de llama inquieta por la acción de la casi inapreciable brisa. 
El árbol ya no estaba iluminado pero se alzaba imponente en la plaza central, señalando al cielo y culpándole a caso de la incapacidad adquirida para alumbrar las fiestas. 
La tormenta había pasado y había dejado la Navidad sin bombillas con electricidad que la alegraran. Ahora, en la calma de la noche, tras las ventanas empañadas por el calor humano, una chimenea cruje y huele a nogal. La cena ha sido devorada y los villancicos han salido de las gargantas de los que tienen mucho o poco que celebrar. Todos duermen o están liados en las mantas con una copita de coñac o de Puerto de Indias con Seven'up con su chorrito de granadina. Hace frío en las casas sin calefacción. Pero hasta en las casas más heladas, puede latir un corazón que suba la temperatura.

No olvidéis el abrigo figurado. 

Felices fiestas a todos. 

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Respirar no es vivir

Las palabras tienen connotaciones diferentes según el contexto donde se encuentren. Esta premisa, tan básica en la narrativa vital, parece ser olvidada por algunos que sólo se limitan a inspirar y espirar un aire casi siempre contaminado en el contexto de su vida.

Por mi trabajo he aprendido que la salud es lo más importante que tiene el ser humano. Por delante del amor. Sobre el amor he de decir que éste no es más que alimento de la salud social: Muy importante, pero parte de la salud total. Ya lo dijo la OMS en su día; algo así como que la salud no sólo es ausencia de enfermedad, sino un compendio de las partes inseparables que componen el ser bio-psico-social que somos. 

Definitivamente somos un planeta enfermo. Porque es verdad: respirar no es vivir, respirar es simplemente respirar. Vivir es otra cosa. Vivir es reír, es llorar, es disfrutar y sufrir, es equivocarte, levantarte y volverte a tropezar. Es mirar al horizonte y ver el infinito con ganas de llegar a el y abrazarlo... Pero es una carrera de fondo. Quizá el mundo esté lleno de personas que no son corredores, que sólo andan. Personas "enfermas" en una o muchas de sus partes inseparables bio-psico-sociales, pero el mundo está lleno también de personas que quieren ayudar a que tu vivas mejor. 
Así que sigue respirando. Pero tu vida, otra vida, empieza aquí.

domingo, 7 de diciembre de 2014

Sueños

Suena algo que parece un avión. Unos motores que rápido surcan el cielo que a veces nos pisa, retumban en mis oídos como abejorros gigantes, negros, desafiantes. Me invade el miedo al imaginarlos. Y de repente, tu voz llamándome tras las sábanas. Sueños que invaden ahora el aire de la habitación y que hacen a tus ojos correr como corre la chispa tras un reguero de pólvora. Duermes, pero no duermes; sueñas, pero ya no lo recuerdas, ni lo harás quizá jamás, no te esfuerces. Pasa otra noche y sigue cayendo la oscuridad entre luces artificiales. Y te pregunto, sin cesar de mirarte inconsciente, si podrás descansar alguna vez, mientras haya un decibelio de más invadiendo un silencio capaz de inquietar hasta a la noche más pacífica. 

jueves, 4 de diciembre de 2014

Mariposas

A medida que vamos creciendo, los mitos de la infancia van algunos desapareciendo y otros, en cambio, reaparecen a modo de recuerdo cuando una canción los trae al presente. El vuelo de una mariposa puede ser precioso observado desde los ojos de un niño. Amaba extender la mano, tocarla,  con la punta de mis dedos y ponerme detrás, cual gato agazapado, para poder atraparla y admirar mientras la cogía por las patitas con toda la suavidad que podía. Me fascinaban los colores y dibujos que alguna mantenía con sus alas abiertas. Nunca pasó, al menos que yo recuerde, que cogiera una de las que más bonitas alas tuviera. Supongo que eran más rápidas y yo, como ahora, nunca me he caracterizado por tener una excelente coordinación, siendo bastante amable. Sin embargo, alguna vez sí atrapé alguna de esas que no destacaban por su belleza. Solían ser monocolor, pero yo tan contenta por haber cogido una mariposa... Hubo un día en el que descubrí esa especie de capa de polvo que tenían sobre sus alas. Me obsesionó el poder coger alguna de color y comprobar si ese polvo eran de una amalgama de diferentes tonos de la gama cromática, diferente al insípido marrón que soltaban mis mariposas monocolor.
Un día en el patio del colegio, mientras andaba detrás de una, una profesora me riñó: me dijo que no tocara las alas de las mariposas, pues ese polvo que soltaban era necesario para levantar el vuelo. "Vas a acabar matándolas". Cayeron esas palabras como sacos de cemento sobre mi conciencia. Recordé alguna que cogí a la que perdí de vista sin que volviera a volar. Y me sentí realmente mal. Aunque me muriera por atraparlas, decidí que siempre era mejor observarlas y dejarlas volar que no ver batir sus alas nunca más.

Hoy se que es más un mito que una realidad, que el polvo no es más que la descamación de las alas de manera natural, pero también se que, sin querer, dañé aquellas frágiles alas para siempre por querer buscar una felicidad propia. Hoy sigo amarrando mis manos, al fin y al cabo creo que no deja de ser una cruel ruleta rusa, una manera de jugarte el hecho de cortar unas alas... 

lunes, 1 de diciembre de 2014

AIDS

Ríos de color rojo surcan inmensas tuberías que llenan de vida ladrillos y agua. Tanta turbulencia hay en ellos que habría que pensar en unos rápidos bajados por barcazas de cuatro esquinas a las que se unen oxigenados amigos en busca de un viaje de ida y un camuflaje carbónico en el de vuelta y acompañados por escoltas que hacen más seguro su castillo.

Pero he aquí un polizón simiesco que aparece en los pasillos por descuido, proveniente de las tierras del cacao, y que lleva a los ejércitos a su perdición, dejando desprotegidos fortalezas, entrañas y corazón, merced a simples fierecillas que sacan sus uñas (que no garras) a la mínima oportunidad.

Y los ríos se congelan para siempre como lo hizo el corazón de Mercurio a principios de los noventa. Sin embargo, mientras la muralla se debilitaba, el alma de la reina continuó regalando vida para cantarle al mundo que debía seguir adelante, cantando que aunque el corazón esté roto, las fuerzas para seguir luchando contra ello debían partir de una sonrisa, pero dando ejemplo a posteriori de que hasta las estrellas más luminosas pueden llegar a apagarse.

1 de Diciembre, día mundial de la batalla contra el SIDA.

Por todos aquellos que murieron. Por todos esos que se han infectado. Pero sobretodo, porque no haya más infectados de los que ya hay.


Pd: Hace 23 años de la muerte de Farrokh Bulsara, hombre, víctima del SIDA (AIDS, siglas en inglés). Freddie Mercury, leyenda, sigue vivo en nuestros oídos.

domingo, 16 de noviembre de 2014

Miradas

Me gusta espiar miradas. Me cuentan historias y, si no me las cuentan, me las invento. Quizá por eso, cuando cojo mi cámara, apunto con mi objetivo a través de la gente buscando instantes, sonrisas... Pero sobretodo busco miradas y las guardo para siempre. 
Hoy he conseguido una que me ha encantado. Pura y limpia (como la mimbre), sincera y sencilla ¡Lástima que escapara al disparo de mi réflex! Espero ver muchas como esa, prometo guardarlas todas y cada una de ellas en un lugar mucho más especial que unos megas en una tarjeta... Las guardaré en el fondo de mi retina, allá donde los recuerdos más bonitos campan a sus anchas buscando a la eternidad.

domingo, 9 de noviembre de 2014

Atravesando

Desde el sofá puedo, si me concentro, oír el andar de los relojes de la cocina. Uno tiene la hora local, otro la de Tokio, la de Nueva York el tercero y un cuarto la de Sidney. Me gusta quedarme mirándolos e imaginarme los millones de historias que ocurren en este mismo momento según la hora de cada lugar. En la mesa, a modo de tapete, un mapa mundi me hace las veces de escritorio móvil para seguir formándome en la materia de la Ventilación Mecánica en terapias respiratorias domiciliarías, que es la que, de momento, me da de comer. 
Y mis mente, lejos de aplicarse con los papeles que llenan la mesa o distraerse buscando países y capitales, se halla atravesando una y otra vez kilómetros para acercarme en sentido figurado a cantarte un feliz cumpleaños con los amigos y desearte que seas muy feliz desde aquí al resto de tu vida.

Felicidades.

viernes, 7 de noviembre de 2014

Aromaterapia

La llama ondea y su luz intermitente hace bailar a las sombras juguetonas de los muebles. La aromaterapia es de esas disciplinas naturistas que no te acabas de creer pero que, como son agradables, te apuntas al carro de la moda y te compras varias velas, inciensos y demás elementos que hagan de la estancia un mix olfativo.

No me gustan q sean de naranja, vainilla, canela u otros olores empalagosos. Prefiero el olor a limpio, a descanso, a despejado... Es como poner en mi nariz la libertad hecha olor. Me relaja.

Y sigo en la penumbra de las velas con la música como compañera, esa que también usan como terapia, esa, que pone sonido al alma.


miércoles, 5 de noviembre de 2014

Ropa de invierno

Las chaquetas por fin han salido del armario. Los termómetros han bajado de numeración y no nos asombramos de un verano largo en medio de un otoño. Los más frioleros han sacado el nórdico para vestir su lecho y se ponen a contar en los cajones si hay suficientes medias y calcetines para aguantar los envites del invierno. Ya las botas cubren los pies que patean la ciudad en busca de su pan y los pañuelos abrazan los cuellos evitando que aires malignos irriten voces que cantan sueños diarios. Todo esta preparado y, sin embargo, no existe modista en el mundo que se haya preocupado de abrigar el alma cuando el corazón tiene frío.

lunes, 3 de noviembre de 2014

Basta

Basta. Basta ya. ¿No veis lo que estáis haciendo? Llenando de oscuridad un mundo de bombillas led, que poco gastan y mucho iluminan a cambio. 

Basta, pero basta ya, ahora, en este momento. ¿No veis que la gota hace mella hasta en la piedra? ¿Qué no hará la gota en la arena? ¿Qué no hará en la madera? ¿Qué no cuando cae sobre la cabeza de la hormiga? Yo os lo digo: La disuelve. La pudre. La mata.

Basta. Basta de egoísmos, de intrigas, de milongas, de la vasta mierda que sembráis sin recoger luego la siembra. 

Basta de violencia gratuita, del ruin uso del ruin quejido que emana de unos labios que lanzan dardos en forma de palabras. 

Basta de usar a la flor como espada. ¿Qué tipo de espada puede ser una flor? ¿Qué tipo de arma? Yo os lo digo: Ninguna. Una flor no es una daga, no es un puñal, ni una espada. No puede ni debe ser un arma, pero si acabas empuñándola sólo conseguiréis marchitarla, matarla. 

Basta, basta, basta y basta: de rencores, de promesas incumplidas, de compras literalmente caras que no sirven más que para tapar agujeros. Paja. Polvo y paja.

Pero basta, de verdad. Míralo. Basta de hacer daño. Basta. Basta. Basta.

domingo, 2 de noviembre de 2014

Colores

Vienes y vas como aparecen las ideas por esa cabeza que ronda las locuras varias décadas apaciguadas. Eres un arcoiris de respuestas. Te da por el rojo y todo lo tiñes, por el azul y todo lo cubres, por el verde y sale envidia y destrucción.

Cuantas veces seguirán obviando lo que deberías hacer y no haces, decir y no dices, callar y no callas. Sigue, sigue. El boomerang volverá cargado de polvos de colores. 

lunes, 27 de octubre de 2014

Agua y aceite. Crítica sanitaria a una gestión nefasta

Como agua y aceite. Así he visto como esta mañana aterrizaba el malagueño en su nuevo hábitat (ya veremos si llega a ser hogar) y se mezclaba en camilla con los compañeros en un porcentaje rozando al cero. Todos extrañados ante la nueva incorporación, miraban con recelo al nuevo y se preguntaban (los que su mente se lo permitia) qué venía a hacer allí. 

Si, cierto, no lleva ni doce horas en aquel lugar. Pero cuando las personas son tan diferentes y con tan distintas necesidades de atención es fácil acertar que ha habido un desacierto total en la elección de esa residencia. 

Vuelvo a acordarme del abordaje holístico de la enfermería, donde se integra al hombre como un ser bio-psico-social y me resbalan por las mejillas dos lagrimones que dejan paso a un río de desesperación por ver como la administración sanitaria o de asuntos sociales permite la ecatombe de mezclar en una misma residencia unos cincuenta deficientes mentales y/o con secuelas post-ictus con un tetraplejico menor de la treintena cuya única arma es su mente y su palabra. El grupo impone sus gritos, sus golpes y las mil y una atenciones que merecen por parte de un equipo multidisciplinar que atienden una gran parte psiquiátrica. El individuo, a parte de nuevo, con necesidades totalmente distintas, que pasan por realizarle todas y cada una de las actividades de la vida diaria, cuidados de asepsia a la  traqueotomia que posee, especial atención a las posibles afecciones respiratorias por retención de secresiones  y... ¿Y luego qué? ¿Dejarlo en el olvido? Qué forma de matar la parte más importante que mantiene a esa persona cuerda dentro de un cuerpo que ya no le responde. Los sanitarios que están allí seguro que le intentan dar todo lo que este en su mano, pero los recursos personales son los que son. Y el centro esta especializado en lo que está. No es un lugar para un tetraplejico con sección medular en C3 (lo que hace que necesite un ventilador para ayudarlo a respirar). 

Me pregunto quien fue la persona que hizo posible un traslado a cientos de kilómetros de un chaval, para alejarlo de su familia, y encerrarlo en un lugar donde  sólo podrá charlar el tiempo que pase con las personas que trabajan allí... Visto que los residentes en su inmensa mayoría carecen de las habilidades sociales para poder entablar una conversación. Y con los trabajadores, esto sólo pasará mientras tengan tiempo para charlar. Que dudo que sea mucho. 

Me pregunto quien fue esa persona. 
No suelo desearle mal a nadie aunque meta la pata. 

Pero la verdad es que sí que me sale insultarle: Maldito hijo de la gran puta. 

martes, 21 de octubre de 2014

Estudio

Letras, fórmulas, guiones, palabras y más palabras que forman frases para el entendimiento de la materia prima.

Qué dura es la vida del estudiante cuando el aprendizaje es el destino único y continuo. 


viernes, 17 de octubre de 2014

Relatos cortos: Helados

En la vitrina, decenas de colores hechizaban los ojos a una cuarta de la barra de la heladería. El chocolate era su preferido. Siempre lo pedía: una tarrina mediana de chocolate. 
Un día, sus ojos dejaron de posarse en el marrón del cacao para bucear por el rosa de la fresa, el azul del pitufo, el blanco con motitas de la stracciatella o el claro amarillo del limón. 
- Hoy la voy a pedir de cookies y yogur- se dijo un día. 
Y estaba buena. Pero echaba de menos el chocolate.
- Hoy me apetece de melón con crema de leche.
Y estaba exquisita. Pero echaba de menos el chocolate.
- Hoy me la voy a pedir de chocolate y kinder bueno.
Y estaba magnífica. Pero se arrepentía de esa otra mitad que no era chocolate.

La variedad era maravillosa, había catado  colores, sabores y la cremosa textura que se derretía lengua a través... Pero ninguno le interesaba tanto como el chocolate...Porque, sinceramente, no era helado de chocolate. 

Y así pasó los años embargando su paladar a un solo sabor... Con la ventaja de saber que ese, y no otro, era su sabor favorito. Por los siglos de los siglos. 

domingo, 12 de octubre de 2014

No te equivoques

No te equivoques. Tú crees que con las sonrisas guasonas y provocativas consigues tu propósito final de fastidiar al que tienes al lado. Y quizás consigas una tormenta interna de rayos y truenos. Pero el tiempo pone todo en su lugar, basta con tener un poco más de la paciencia finita y fiereza al defender en lo que se cree, como la que tenía en el corazón la Dama de Hierro. 

No, no te equivoques. Porque tú crees que los bombones compran oro y grana, piensas que compran felicidad, palmas, y risas. Pero la felicidad no se compra. Se trabaja, se hace con saber hacer, no sólo con estar bailando alrededor de una hoguera como un fantasma en la noche de San Juan. 

No te equivoques. Porque el final del camino lo eliges tu. Igual que elegiste el propio camino y las salidas del mismo. Aquellas que concurren en una serie de actitudes que no llevan a mayor lugar que al fracaso personal. 

No lo hagas. Aún estas a tiempo de rectificar.

Escucha: No te equivoques. 

martes, 7 de octubre de 2014

Relatos cortos: Fugitivo

El sonido del látigo debió despertarme de la inconsciencia de mi estado. Aún me hallaba aletargado por el dolor que me envolvía cuando la puerta se abrió. El olor a humedad era tan intenso que juraría tener un musgo tapando mis senos nasales, y una leve luz al final de la habitación me decía que la noche ya había pasado sobre aquel maldito lugar.

Sólo esperaba la hora en la que el sol pudiera calentar lo suficiente como para hacer que mis huesos no temblaran en un baile entre el miedo y el frío. Con calidez siempre se piensa mejor. Se siente mejor. Se está mejor. 

Aún no, aún hay frío. El vaho asciende hasta que desaparece. Y tomo por aliada la inconsciencia, que la paz me embriague como el licor más preciado del mueble bar de un vejestorio sin más pretensiones que la de vivir sólo un día más. 

domingo, 28 de septiembre de 2014

Escribe

¿Cuándo el cielo decidió abrirse dando paso a un sol de justicia frente a las nubes de algodón? Esa parte me la perdí ayer enrollada en la manta de mi habitación, con un suspiro y un vaso con batido de chocolate con sabor a gloria que hacían las veces de acompañantes pacientes. 
Y suena el timbre y cambia la melodía. Cambia el espacio, cambia el olor que flota, las ojeras desaparecen y la tarde se vuelve espectadora de escenas cariñosas entre cómplices silencios. 
Y suena una risa. Y sobreviene un llanto. Pero todo vale, porque todo hace pensar que el otoño lluvioso dará de si cadenas rotas. Libros abiertos esperando ser escritos. Lazos de libertad. 

domingo, 7 de septiembre de 2014

Lluvia sana

Estoy tumbada en el sofá, abrazando con mi cuerpo a una de las mejores amigas que me acompañan en los momentos de soledad: mi guitarra. He parado de chapurrearla (no me atreveré a decir nunca que se cómo tocarla) porque ha empezado a entrar por el balcón el olor a tierra mojada del chispeo de septiembre. Lo he abierto de par en par y he retirado las cortinas. Me gusta ese olor y esta oscuridad de las nubes tapando el sol. Hoy me gusta, porque espero a un avión que me lleve a un lugar que mis pies nunca han pisado, y eso siempre me pone nerviosa... Radicalmente opuesto a lo que me transmite esa amalgama de sensaciones para mis sentidos del olor de la lluvia, su tacto húmedo y el sonido de las gotas por las que he cambiado las cuerdas de mi guitarra. 

Cierros los ojos y disfruto. 
 

sábado, 6 de septiembre de 2014

Shhhhh

La nada del sonido a veces encierra el todo de los sentimientos. Un silencio acompañado de un gesto puede resultar más esclarecedor que cualquier sonido articulado por un hombre. 

En una conversación puede ser falta de ideas y argumentos, culpabilidad, derrota. Pero también respeto, evitación de una confronta u otorgar la verdad. 

El silencio puede ser tu mejor aliado cuando las que brotan son las lágrimas en vez de las palabras, por que a veces va acompañado del nudo en la garganta. Pero también puede ser tu peor enemigo cuando vas perdiendo en la batalla dialéctica. 

Lo que es cierto es que el silencio de los sentimientos, casi siempre, busca su hueco y se instaura. Y casi nunca debes romperlo con la estridencia de la palabra. 

Ya lo dijo Alejandro Dumas... "Para toda clase de males hay dos remedios: el tiempo y el silencio".

Así pues... Shhhhhh....!!!


jueves, 4 de septiembre de 2014

Zona segura

Todos tenemos una zona a la que podríamos llamar "zona segura". Esa en la cual te sientes intocable, con protección total o parcial del miedo real que acecha a tu mente, aunque este miedo venga de algo imaginario. Puede ser un lugar, una acción, una persona o una conversación. Al fin y al cabo, un elemento que va haciéndote más fuerte hasta que parece que no lo necesitas... Pero quieto, no finjas, no la vendas, no la desprecies, no la tires olvidada en el rincón... Esa zona volverá a hacerte falta. Es ley de vida, mar de sufrimientos con pequeñas islas paradisiacas de palmeras cocoteras con aroma a vacaciones. Aunque sean mentales.

Que no es poco.

martes, 26 de agosto de 2014

Gracias Gordita

Mil caricias te di y mil recuerdos me quedan de cada una de ellas. Hoy sólo tu pérdida empaña la sonrisa que siempre me provocaste. No habrá animal más noble que tú, criatura más tierna y amor más sincero que el tuyo. Muchos dirán que sólo eras una perra (qué perra!), pero tú y yo sabemos que eras mi gordita peluda. Solo me queda agradecerte por hacerme feliz con una mirada, un remolino de tu larga cola y un toque de hocico en mi mano. Esas pequeñas cosas que te hicieron el animal más bonito de la tierra. Gracias Maná.

domingo, 24 de agosto de 2014

Tu sitio

No hace falta no tener orientación para andar perdido. Basta tener la mente inquieta en el lugar donde te hallas y los pies bailando sobre una superficie llameante. Es fácil sentirse perdido hoy día. Supongo que como en todos los tipos de crisis vitales, el cuerpo reacciona según la mente direcciona. Y así corremos por caminos sinuosos sin ver el final del cataclismo en el que nos hallamos sumidos.

Ayer me encontré un poquito más. 

Un cajón con su contenido puede significar mucho. 

A veces basta con elegir un buen compañero de viaje.

martes, 19 de agosto de 2014

Instintos Básicos

Un pisotón en el pecho a veces duele menos que la sensación de no controlar aquello que te pavoriza. Es el temor a lo desconocido, a lo que se escapa de tus manos. Ansia, congoja, angustia y preocupación que bailan en lo psicosomático y hacen la puñeta a más de uno. La caja torácica parece estrecharse tanto que son los pulmones y no las cuerdas vocales los que gritan pidiendo auxilio en forma de aire.

Esa es la mejor forma de controlarlo: Respirar. Eso y buscar el confort de quienes nos protegen bajo su brazo de un sentimiento desagradable, y nos liberan de las cadenas que envuelven los sesos y el alma. También nosotros podemos protegernos y cortar los grilletes del miedo.

No es de cobardes huir, pero a veces tampoco es necesario salir corriendo. Calma. Abre los ojos y mira, que todo llega. Respira, se de qué hablo. Respira.


sábado, 26 de julio de 2014

Ana Y David

A horas de dar el Sí, quiero, debe haber en sus estómagos una mezcla de comida (la que haya entrado) y nervios. Pocas parejas viven a los treinta la pasión de los quince con el amor y el respeto de los cuarenta.
Debe ser porque la vida les ha hecho felices, pero también los ha hecho partícipes de distancias y debates vitales con cirujanos de por medio; y eso, amigos, da madurez y solidez a la relación.

No me cabe duda que hoy lo pasaréis (pasaremos) bien. Que hoy brillarán esas sonrisas a las que nos tenéis acostumbrados más que nunca. Porque vosotros sabéis lo que es disfrutar del día a día. Y hoy es vuestro día...

Feliz día, feliz vida.

Medicina del mundo

Besos sinceros, bonitos, besos de amor y amistad, de cariño o compromiso, de saludo, de triste despedida o confusos hasta luegos. Besos a medias, besos enteros, largos besos con recovecos y besos fugaces, robados, inquietos en los labios del que quiere besar, pacientes besos y apasionados. Besos de madre, de hermano, besos de alivio y de celebración, de tonteo, de juego de la botella y tercer compañero al atrevimiento y la verdad. 

Besos. Besos. Besos. 

XXX




viernes, 25 de julio de 2014

La profesión más bonita del mundo. No se admiten réplicas.

Me he tenido que levantar. Lo juro. No he podido resistirme. Flechada me he venido al ordenador llorando como casi nunca por la felicidad que me produce ser enfermera. Hoy lo he recordado al ver el documental "Ángeles Sin Alas", de la Unidad de Quemados del Hospital de la Paz de Madrid. (Para ver el vídeo, haz clic aquí)

Estoy llorando por corroborar que esos compañeros que están en los puestos sanitarios a lo largo de la geografía española, a pesar de los recortes y el sobretrabajo, rebosan humanidad. Y es verdad, hay compañeros que la monotonía o el cansancio les han podido y han perdido esa chispa que debieran tener. Pero puedo asegurar que esto que he visto en el documental, lo he vivido en cada lugar en el que he estado en mi paso por la Sanidad Pública.

Lloro porque me siento identificada con cada cosa que han dicho en ese vídeo de nueve minutos. Ese vídeo que me ha obligado a salir de la cama para escribir esto que me sale de dentro. Porque siempre quise ser enfermera para poder paliar sufrimiento, y NO, nunca, pero NUNCA, voy a acostumbrarme a ver la miseria humana; nunca, pero NUNCA, voy a mirar a otro lado si veo a alguien sangrar el cuerpo o el alma.

Quiero ser enfermera. Me gusta ser enfermera. Soy y seré enfermera. Hoy lo he vuelto a recordar en medio de esta oscuridad laboral en la que a veces me hallo. ¡Soy enfermera, joder!

Gracias, de corazón, a todos mis compañeros. En especial a esos que hacéis que esta profesión sea la más bonita del mundo:


Si puedes curar, cura. Si no puedes curar, alivia. Si no puedes aliviar, consuela. 

miércoles, 23 de julio de 2014

Eso que me apetece

Vuelve a ser de noche en la ciudad. Me he sentado en la terraza a dejar que mis dedos busquen palabras ocultas en las teclas del ordenador. No puedo dormir por varios motivos, aunque el más importante sea la presencia de uno de esos pensamientos que coquetean de oreja a oreja, esquivando ser resueltos escondiéndose tras las cuencas de los ojos. Eso y el puñetero cuello que se empeña en hacerme notar que estoy en una montaña rusa cuando lo que tengo en frente es el techo de la habitación. Al final tendré que hacer uso de la farmacia casera para relajar un poco la musculatura y poder dormir algo, aunque intento evitarlo a toda costa... ya se sabe: en casa de herrero, cuchara de palo. 

Se adivinan a lo lejos al menos cinco o seis cantos de grillos y un ladrido de algún perrillo que no le gusta lo que ha oído, olido o visto. A pesar de no ser demasiado silenciosa, la verdad es que la noche al aire libre está apacible, para echar un colchón en la terraza y dormirse viendo las estrellas si la contaminación lumínica lo permitiera. 

Este año no me pierdo las Lágrimas de San Lorenzo. Llevo muchos veranos queriendo ir sin encontrar plan, pero esta vez me voy aunque sea sola. Serán un par de noches cortas para observar decenas de estrellas fugaces, y esa ya es bastante compañía. Me avituallaré con una sudadera ancha, un par de mantas (una para el suelo y otra por si me entra fresco, que soy muy friolera) y unos buenos calcetines e iré en busca de la zona más oscura para poder ver luz en un Agosto que, parece, se presenta complicado. Será una buena terapia antiestrés o un buen enlace entre días de trabajo. Lo único que se es que me apetece, y ha llegado un punto en mi vida en que me apetece hacer... sencillamente lo que me apetece. 

Hemingway


Temía estar solo, hasta que aprendí a quererme a mí mismo.  
Temía fracasar, hasta que me di cuenta que únicamente fracaso cuando no lo intento. 
Temía lo que la gente opinara de mí, hasta que me di cuenta que de todos modos opinan. 
Temía me rechazaran, hasta que entendí que debía tener fe en mi mismo. 
Temía al dolor, hasta que aprendí que éste es necesario para crecer. 
Temía a la verdad, hasta que descubrí la fealdad de las mentiras. 
Temía a la muerte, hasta que aprendí que no es el final, sino más bien el comienzo. 
Temía al odio, hasta que me di cuenta que no es otra cosa más que ignorancia. 
Temía al ridículo, hasta que aprendí a reírme de mí mismo. 
Temía hacerme viejo, hasta que comprendí que ganaba sabiduría día a día. 
Temía al pasado, hasta que comprendí que es sólo mi proyección mental y ya no puede herirme más. 
Temía a la oscuridad, hasta que vi la belleza de la luz de una estrella. 
Temía al cambio, hasta que vi que aún la mariposa más hermosa necesitaba pasar por una metamorfosis antes de volar. 

Hagamos que nuestras vidas cada día tengan mas vida y si nos sentimos desfallecer no olvidemos que al final siempre hay algo más. Hay que vivir ligero porque el tiempo de morir está fijado. 


Ernest Hemingway 

martes, 22 de julio de 2014

Caminata

Hoy he madrugado. Bueno, casi todos los días lo hago aunque no tenga que trabajar. Parece que el despertador está en las persianas de mis ojos, que se levantan con arte con un mínimo rayo de sol que asome por las rendijitas de mi ventana.

Hoy he madrugado y me he puesto unos leggins, una camiseta deportiva y unos botines con calcetines tobilleros y me he ido a andar. 

He respirado de la mañana. He respirado frío. He respirado de la naturaleza que a pocos minutos encuentro pasando la Fuente de Ocho Caños de mi ciudad natal. Y lo he hecho sin más música que la de los cantos de los pajarillos en verano. Memorizando el camino que tenía por delante y cerrando los ojos he respirado profundo. 

Y luego, sin más compañía que los olivos del camino, no he tenido más remedio que sentarme a ver pasar la vida.  

lunes, 21 de julio de 2014

Volarás

He soñado que volaba. Era tan... ¿real? Me sentía libre, con todos los tópicos que pueden existir a cerca de volar. Todos, toditos los he sentido en mis carnes. Volaba como Wendy voló la primera vez con Peter Pan, con aquel camisón y los brazos en cruz, sin importar que Nala quedara dando aletazos con sus orejas y esa cofia extraña que le pusieron en la versión de Disney. Volaba sin cadenas, sin preocupaciones, con la mente en blanco... solo el aire me sacaba de mi éxtasis para llevarme a otro besándome la cara y meciéndome el cabello, cruzando nubes y sintiendo la fría humedad meterse entre la camiseta ancha con la que hoy he dormido. No había nada más que el cielo y yo, con un campo de trigo haciendo de espectador de lujo y un sol que no quemaba, sino que me acariciaba meloso con sus rayos.

Ojalá tengas un sueño como este. Ojalá esa libertad se haga realidad.

Yo no quería despertar. 

domingo, 20 de julio de 2014

Cactácea

El mito literario de las rosas con espinas, frágil a la vez que agresivas, preciosas pero con sus espinas, tienen su similitud menos romántica con las plantas cactáceas, más comúnmente conocidas como cactus.

Los cactus también deberían tener su aquel en el mundo de la poesía, lo que pasa es que digo yo que derivaría el poema en un estado un poco más belicoso que las delicadas rosáceas por eso de tener tanas espinas. A ver... a mi me gustan los cactus, a pesar de caerme en un pencal una tarde de verano con mis trece años y un bikini como única prenda superior. Ya os podéis imaginar como quedó mi lado derecho del torso y brazo... el cactus parecía yo, además de varios hilitos de sangre que pude quitarme una vez llegado a mi destino, y bicicleta en camino, estuve quitándome espinas haciendo equilibrio y durante varios días después. 
Pero a lo que iba que me ando por las ramas y me pierdo entre tanta anécdota adolescente. Me gustan porque son unas plantas olvidadas, pero muy agradecidas. Son el "no me des casi nada a cambio que te saco una flor de la manga" de las plantas, eso entre espina y espina. Un poquito de agua cuando te acuerdas y allá que van creciendo. Un clima horroroso a su alrededor y ahí que sigue en su tierra y sin mover una ápice. Le pegas un tajo en el tallo, y en vez de quejarse te dan agua (ojo, algunas es verdad que son una mijita más cabroncetas y son venenosas...) Si te pinchas es porque te has acercado a donde no debes, porque si la tocas en un sitio libre, es suave, frío y agradable al tacto. 

Señores escritores... no vean solo las espinas en el cactus. El cactus es mucho más, es un ejemplo más de que todo aquel que muestra una imagen dura, combativa y provocadora suele tener en su interior algo positivo. Probablemente la vida no lo trató bien y, con poco que le des, es capaz de ofrecerte una de las cosas más maravillosas que hay en el mundo: Una flor.

Eso sí... tened cuidado: Algunos, por mucho que le des, nacieron venenosos y sin antídoto. 


Sombras Chinescas

La gran mayoría de la humanidad vive en grandes o pequeños pueblos y ciudades donde la cadencia de la mentira vuela por el ambiente más urbanita al más rural, siendo éste decreciente por lo general a menor densidad.

Es como un juego de sombras chinescas, ves la proyección de unas manos sobre una pared plana que emulan elementos, personajes y animales que sabes que no existen, pero que son reales en la ficción, graciosos, agradables de ver y por supuesto admirables en cuanto a la destreza del autor... Pero no dejan de ser manipulaciones, como el mago que deleita a los presentes sacando un conejo de la chistera: un truco impresionante y ovacionable, pero un truco al fin y al cabo.

Y así estamos... con trucos por todos lados, manipulados por los que mueven los hilos en este teatro que es la vida. 
O al menos eso intentan... El caso es que podemos ser nosotros los que hagamos de la vida un espectáculo a nuestra manera. 

Quién sabe si esta vez, es el conejo quien proyecta una buena sombra. 


viernes, 18 de julio de 2014

Días de Verano

Calurosos, asfixiantes, rítmicos en el sopor de tardes de Tour de Francia y ventiladores a revienta calderas en lugares sin playa ni piscina. Hoy no es un día de esos. Se ha levantado fresco, nublado, venteando las callejuelas de un centro de pueblo que, hoy sí, tiene más vida.

Es... Como una señal, un respiro en mitad de días insoportablemente cargados de termómetros ascendentes y malas noticias internacionales, nacionales y provinciales; cargados de rebanamientos de sesos, retos mentales, y aguante laboral. Un respiro al día a día de este extraño verano. De un verano sin vacaciones.

viernes, 4 de julio de 2014

Rey

La ley del más fuerte se suele imponer en la selva, y normalmente el más fuerte es el León y por algo lo llaman Rey.

Hay muchos tipos de reyes, pero uno en concreto (el déspota, el desconfiado, el bipolar, el falso) no tiene cabida en realidad en el reino animal. Porque puede parecer el más fuerte, pero no lo es. Porque no podría con todos a la vez. Y puede parecer el más listo sin ser el más alto, el más controlador sin ser el más ancho. Pero no. Ni es listo, ni controla bien a sus leoncitos enrejados, enojados y embarbascados en cotilleos. Verde envidia que corroe a las mentes inquietas e inseguras. Qué pena. Con lo que podría ser su reino y no será.

Muchos tipos de reyes. Pero su ecuación esta vez está clara en resultado, no ya en tiempo ni espera:

Rey sin leal vasallaje = Rey abocado a la rebelión selvática

Entonces será un Rey sin cetro con el que gobernar, sin manto bajo el que cobijarse, sin trono sobre el que gobernar, sin corona bajo la que dirigir, sin reino con el que compartir el trigo que sembró en un campo de Sol y que se convierte en maleza por donde pisa.

Un pobre Rey.

miércoles, 25 de junio de 2014

Microcuento

No aguantaba pensar en eso, le hacía mal, le creaba ansiedad y creía que se iba a volver loco. Todos los días quería evitarlo y por ello era desgraciado... Porque en realidad no debía, no podía y cada día se encontraba con él... Con su futuro. 

lunes, 9 de junio de 2014

Silencio

En medio de una fresca madrugada, una manga fina te puede dar la vida: Devolver el calor a aquellos brazos que notaron un frío viento y que hicieron olvidar el letargo en el que te hallabas, sumisa.

Estoy asomada en el balcón, apoyada en la baranda y echo de menos en mis dedos un cigarro que nunca tuve en ellos. Una calada larga y profunda debería servir de compañera ideal a la mirada fija en el horizonte de siluetas de torres y palmeras. La ciudad duerme. Al menos la mayoría... Pasa, a unos metros justo debajo, un chico presumiblemente de vuelta a casa, bien vestido, con una chaqueta oscura colgada en el brazo, camisa ceñida y paso firme. Canturrea. Es tarde la recogida para ser domingo. Me pregunto de donde viene y a qué hogar pertenece.¿Cuál será su historia? 

¿Qué hace?
¿Qué busca?
¿Qué espera?

Suena una sirena a lo lejos y luego el silencio... bendito, constante. Respiro.




Perfecto.

viernes, 6 de junio de 2014

Maltrato líbero

Uno se maltrata cuando busca en su interior aquello que no le gusta y se regodea en ello.

Uno se maltrata cuando busca lo que le hace daño haciendo kilómetros hacia el pasado.

Uno se maltrata cuando no ve que más allá del dolor, hay una vida que vivir.

Uno se maltrata cuando se come kilos de chocolate y en vez de disfrutarlo, corren por sus mejillas lágrimas de culpa.

Uno se maltrata cuando hace de sí mismo su peor enemigo.

Uno se maltrata cuando al único al que engaña con sus mentiras es a sí mismo. Cuando ha perdido lo realmente importante y lo que le importa realmente no lo es.

Uno se maltrata no dejandose, simplemente, ser feliz.

Qué pena al pensar la inmensidad de auto-maltratadores que hay sueltos...

 

domingo, 25 de mayo de 2014

Ya no

A veces, basta girar la cabeza hacia derecha o izquierda y entornar los ojos hacia atrás para anhelar con más ansias el tiempo y lugar que pasado está. De los errores hay que aprender, famosa cita y muy cierta. A veces, mirar a lo que ya sucedió sentada ante un café con los pies firmes en el suelo y un amigo enfrente, ayuda a superar el mal trance y a escoger el mejor camino en lo personal y en lo social. A veces, una tableta de Nestlē puede que te haga doler la barriga y descomponer intestinos, pero calma más nervios que la melisa. A veces, es necesario quedarse en el silencio de la soledad y escuchar el sonido de una lágrima cayendo. A veces, no hace falta más que tiempo y ganas de no pasarlo mal.

Ya terminó. Ya no está. Ya no es. 
Ya, no es.

martes, 20 de mayo de 2014

A quien le importa...

Hubo una época en la que me mofaba del refranero buscando por las redes esos mismos refranes pero disfrazados de palabras grandilocuentes. Por ejemplo: A palabras incoherentes producidas por mentes esquizofrénicas, la trompa de eustaquio permanece en estado de letargo total... A palabras necias, oído sordo; vaya.

A mi me gusta mucho el refranero español. Es una gran fuente de sabiduría popular y son tan veraces que a veces sorprende. Como todo, los refranes también van acompañados de música. Alaska es un personaje nacional que poco tiene de común, excepto su archiconocida canción "A quién le importa". Un único fallo a este himno de la libertad de pensamiento... Se debería poder cambiar el sujeto de la oración y poner un "tú" en vez de un "yo"...

Más claro, más claro... A quien le importa lo que TÚ hagas.

 

 

 

Pues eso.

 

 

 

martes, 13 de mayo de 2014

Narrativa entálpica

Cuando viajas por las letras, las palabras fluyen describiendo situaciones reales o imaginarias, como fluye el agua cuando abres un grifo: depende de la tubería y seguro de algún otro elemento de la fontanería que a mi se me antoja profunda. Entonces el agua brota a borbotones como brota la sangre arterial en un corte, sale de forma continúa emulando un manantial que da la vida o a cuenta gotas, como el segundero de un reloj. 

Preguntan a veces qué significan esta narración, aquella metáfora o la metonimia de más allá. Pienso, me tomo un minuto con cara de interesante y respondo: a veces nada y a veces todo. Normalmente me quedo aquí... Pero hoy, querido lector, te lo voy a explicar. 
A veces son desvaríos de los dedos que corren por el teclado. A veces llevan ocultas las palabras mensajes de aliento para otras personas o para la que porta la pluma digital, y otras llevan dardos envenenados a quien nunca mereció una lágrima derramada. O quizá si pero las dejó de merecer cuando tomó las decisiones erróneas. Porque uno sigue siendo dueño de lo que sueña pero más de lo que hace o deja de hacer a pesar de lo que rodea el asunto. Cada loco con su tema. Pero loco dueño de su tema. 

No es cuestión de juzgar. Es cuestión de narrar tu realidad con florituras o tu ficción barroca según sople el viento de levante o poniente. 

Es una narrativa... ¿Cómo decirlo? Finalizada pero con ganas de más... Bonita en su insuficiencia, con punto y final pero a medias...  Como ese beso que pedía la canción aflamencada de la que me enamoré perdidamente cuando la escuché en una voz amateur, rota, bella, incompleta..."el beso que sin darse se adivina..."

sábado, 10 de mayo de 2014

Olores fríos

Algunas veces traes un olor frío, azul, taciturno, un olor a desesperación y a semilocura. Una vez te olí mucho antes que tú lo hicieras. Se te olía a leguas. Y eso que no me considero persona con unas narices importantes... Es más, la propensión a la sinestesia en mí es tan común que a veces como, de comer comida, antes por los ojos que por la boca, por lo que me empacho antes de empezar casi. 

En tu caso, este olor es indebido, inapreciable a veces, invisible otras, inapetente siempre, inteligente nunca. Pero como todo pasa con las manecillas de un reloj suizo, más pronto que tarde y mejor por la mañana, la pradera de los sentidos se abrirá paso por el espeso bosque muerto y correrás con tu pelo al viento, con pies descalzos, sintiendo como dejas tus huellas sobre la tierra. Olerás blanco, olerás puro y desprenderás olor a cordura, a manzana, a paz. Como otras muchas veces haces. 

No te extrañes si las huellas se borran tras otro temporal... Pero en tu memoria estarán frescas, como tierra húmeda que alguna vez pisaste... Y allí, en la calma de la marea baja, la deberás buscar.

jueves, 1 de mayo de 2014

Vida

La vida a veces te da regalos tan inesperados que, a toro pasado, aun te queda el sabor de haber sabido disfrutar del momento.

A veces no basta ver, hay que mirar; no basta con oir, hay que escuchar; no basta con tocar, hay que palpar... Disfruta, mira, escucha, palpa... Saborea la VIDA.

domingo, 27 de abril de 2014

Relatos cortos: Segundas oportunidades

Dormía plácidamente cuando un zumbido daba vueltas de oreja a oreja, pasando cual bólido rojo, caballo con crin al viento en un galopar hacia el capilar principal de su dedo pulgar. 

Enciende la luz, ojos inyectados en sangre de ira despierta. Busca y no encuentra, sólo oye el zumbar y prepara el aplauso mortal. 

Y lo ve. Perdone el lector: La ve (pues todas las que pican, sin querer ser machista, son hembras) Una díptero! 

Pero se va, se va y no quiere ya picar. Quizá nunca quiso en realidad. Y la deja alejarse hacia el destino que ya no puede manejar. Ella, pensó, también tiene su corazoncito...

domingo, 20 de abril de 2014

Relatos corto: Tecnología

Miró al horizonte desde la silla de rayas blancas y azules. Una ola había borrado el mensaje que había colgado a su perfil de Facebook desde su móvil. Estaba muy de moda hacer eso. Y ella siempre se consideró cuanto menos actual. Sinceramente estaba bastante familiarizada con las redes sociales. Se manejaba en una masa social de seguidores importante... Y a ellos les debía información casi permanente. Le encantaba el feedback que producían sus mensajes ante gente la mayoría desconocida, aunque su padre siempre le decía que eso era un peligro ¡Qué sabría él, si ni siquiera sabía usar el Whatsapp! La era de la tecnología parecía haberlo saltado a la cabriola, con sus coces y todo, a pesar de no llegar a los sesenta. No sabía lo que se perdía.

Jugueteaba con una coquina de las decenas que había en el cubo de su sobrino, publicó que deseaba que todo le fuera bien al chico que pretendía batir el récord de distancia corriendo hacia atrás (como si lo estuvieran rebobinando en una cinta de VHS, rió) y pensaba, mientras hacía remolinos en el agua, que aquel día de playa era, simplemente, perfecto... Que así lo iba a describir después de una ducha y un par de onzas de chocolate en su blog y esperaría, esta vez en secreto y con paciencia de relojero, el primer comentario para ser infinitamente feliz.

sábado, 19 de abril de 2014

Relatos cortos: Hastío

Los plataneros se mecían merced al viento que se había levantado en la plazoleta. Parecía mentira que horas antes el sol estuviera calentando el banco donde estaba sentado mientras jugaba con la correa de Scot entre las manos. Ahora hacía un frío tremendo. Se había quitado las gafas de sol y las había metido en el bolsillo derecho de la chaqueta vaquera. Tenía un agujero, pero era demasiado pequeño para que las gafas se escurrieran y se perdieran. Seguro que al ponerlas encima de la cómoda de la entrada descubriría un arañón en los cristales ahumados. Otro más... ya no tenía el cuidado que antes ponía con ellas. Se había enamorado un día que pasó por el escaparate del Factory SunGlasses, pero como todo en su vida, el interés por ellas se fue apagando con el paso del tiempo... como se había apagado el día, tarde de viento y de nubes precedida de una espléndida mañana de sol y juegos. Sólo quedaba esperar si la luz llena de Catalina sería capaz de iluminar el camino de vuelta a casa.

lunes, 31 de marzo de 2014

Recompensa

Mira que te decía que quererte a ti no era difícil, que, a pesar de ir sin intención, agradas con tu forma de ser y te reconocen enseguida como líder, como fiel aliado en el arduo quehacer laboral.

Y aquí tienes tu recompensa.

Mientras, me sentaré a ver como reconocen tu trabajo jefes e indios, chamanes y guerreros... Y quizás sientas temblar tu mano, pero entonces habrás de agarrar con firmeza la lanza y hacer señales de humo, porque la soledad no existe cuando te rodeas de gente que antes has ayudado y está loca por devolverte el favor. Baila alrededor de la hoguera. Baila.

Y es que a veces, solo a veces, la vida te da lo que mereces. Te lo mereces.

sábado, 22 de marzo de 2014

Mari y Sergio

Hoy es un día de amor. Pocas cosas se pueden decir que no hayan escrito ya los poetas y eruditos siglos y siglos atrás sobre él, y yo, la verdad, no lo voy a intentar si quiera. Qué tontería, ¿no? Si ya sabemos todos lo que es... Lo estamos observando cuando los vemos a los dos... Y lo estamos celebrando. ¿No es así? Hoy es un día especial para muchas personas... Para vosotros, por supuesto, los primeros, y también para esas otras que os queremos con vuestras virtudes (va, los defectos los dejamos a un lado)... porque nos hacéis felices con solo ver que hoy brillais con luz propia.

Gracias,por compartir este momento (vuestro momento) con nosotros, y porque, en las celebraciones, lo bueno es lo que se celebra, y la compañía con la que se hace y hoy, esto último con vosotros, es inmejorable.

Hoy, Mari y Sergio se dicen un sí eterno, grande, en mayúsculas y con una sonrisa de felicidad en los labios que difícilmente olvidaremos los que tenemos la suerte de presenciarlo. Hoy, se celebra que el amor entre dos vuelve a un entorno perfecto, con los muros de una antigua casa palacio como testigo que ha visto pasar a generaciones y generaciones de utreranos durante siglos. Quizás, esta sala donde os vais a comprometer observó historias de amor eternas y miradas tiernas, directas a los ojos negros zainos de la gente del sur... porque lo bonito en realidad no son los ojos (aunque también), lo bonito son las miradas, como las vuestras...

Permitidme el lujo de nombrarme ahora por un segundo portavoz de nosotros, vuestros acompañantes en el día de hoy, y atreverme a decir que cada uno de los presentes os deseamos felicidad en cada día de vuestra vida juntos, y que vuestra compañía utrerana siga siendo cotilla muchos años más y vea crecer a vuestra familia con el amor que hoy flota en el ambiente.

Felicidades Mari, Felicidades Sergio. No me queda otra que acabar este pequeño escrito con la certeza de que este 22 de marzo quedará en vuestras retinas y en vuestros oídos cuando diga y respondan por primera vez eso que suena en todas las bodas y que por fin os lo decimos a los dos. ¿No sabéis de qué hablo? Pues abrid los ojos y preparad las orejas, porque los que os queremos os gritamos eso de... ¡VIVA LOS NOVIOS!



jueves, 13 de marzo de 2014

Dimes y diretes

O donde dije digo, digo Diego. Y es que las palabras se las llevan los vientos huracanados del medio oeste, con sus arbustos corriendo tras la polvareda mientras un vaquero se saca de su chistera un conejo blanco con reloj y as de picas, con los ojos entornados hacia la llanura solitaria y un hakunamatata falseado con sonrisa de cocodrilo hambriento. 

Como ves, muchas palabras que cuentan historias sin sentido. Muchas palabras sin sentido. Como ves.

 

¿O es que aún no lo ves?

 

jueves, 6 de marzo de 2014

Padrino

Hiciste de mis veranos de infancia un juego continuo. Sería un insulto decir que fueron buenos los ratos que pasamos junto a ti, porque sobrepasaron las risas y las confidencias con media sonrisa limpiando la paellera. 
Te vas, pero no te vas. Nos dejas, sí, pero dejas algo importante, menos tangible, más que cierto: amor, muchas cosas bonitas en un saco que llevaré de recuerdo allá donde vaya. 

Te quiero padrino.

lunes, 3 de marzo de 2014

Tic tac

Tiempo amigo, que hace aceptar y olvidar lo que daña el alma.

Tiempo cobarde, que corre como nadie sin importar lo que atrás deja.

Tiempo malvado, que no detiene las horas perfectas para hacerlas perpetuas.

Tiempo guardián, que se cuela en la maleta y no te abandona jamás.

Tiempo hastío, que lo mismo le da halo y alas que tridente y rabo.

Tiempo arbitrario, tiempo erudito, tiempo implacable, inminente, ya pasado... tiempo a destiempo... Tic tac, tic tac, tic... Tac.

domingo, 2 de marzo de 2014

Frases prestadas


"Sobrevivo invadiendo las calles de magia para que podáis sobrellevar el día a día". Siempre fue necesario el invierno para poder llegar a sentir la calidez del verano, el olor de la primavera y el baile sinuoso de las hojas que caen en otoño. El frio se irá... nunca el hielo duró eternamente, porque a veces, aparecen "personas que te regalan su tiempo sin cronometrarlo"





sábado, 1 de marzo de 2014

Paco de Lucía o cómo regalar música a la vida

La vida en un polígono en fin de semana es aburrida, fría, triste y monótona. No pasa un alma que silbe por la calle y amenice la estancia entre naves y árboles caducos con sus ramas desnudas por el paso del tiempo.
La ciclogénesis, que tan famosa se ha vuelto después de su visita por, sobretodo, tierras gallegas, acompaña hoy en las aceras con un cemento más gris que nunca. Eso es porque el día también tiene sombras y está color de Grey, pero sin el "señor" delante, que os ponéis tontorronas... y yo no hago más que acordarme de un señor (ahora sí) músico, un genio de las cuerdas que tantas veces ha llevado el nombre de España lejos de la península, y el arte del Flamenco, junto con el gitano de San Fernando, a una dimensión difícil de explicar.

Hoy, en el gris polígono, con los cascos puestos y un día que trae lluvia fuera de las rejas, le doy al play con el volumen bajito para oir, una vez más, como el agua cae del cielo... llorando quizás la vuelta a casa de Paco de Lucía a Algeciras, para decir un "hasta luego" al que también entre dos aguas acarició la guitarra, y le puso melodía a la voz de Camarón, excelencia a la música y música a la vida.
Dejas mucho aquí. GRACIAS.



jueves, 27 de febrero de 2014

Del campo

Las aceitunas son del campo lo que los bombones a la repostería, gusto exquisito que brinda la tierra. Me encantan. Las gordales son de pueblo utrerano, aliñadas con gusto del macaco andaluz, de días y días sufriendo arañazos venidos de las ramas de los olivos y días reposando en un tarro de vete tu a saber. La leche de tierra es aceituna exprimida que ofrece oro líquido como premio a tal prensa. Aceite que toca la superficie del agua de los macarrones que tengo cociendo a fuego medio y baila, como un nenúfar, coqueteando con la corriente.

domingo, 12 de enero de 2014

Relatos cortos

*** [...] Cuantas veces te vi reir brotó un volcán de chocolate en algún lugar que nos quisimos comer sin importarnos mancharnos las manos. Cuando te vi mirar al futuro en compañía, fue de anís el río que embriagó el plan perfecto. Cuando tuviste mirada ojerosa, los girasoles del campo le volvieron la cara al sol porque se enojaron... No querían tu ceño fruncido. Cuando te escuché soñar en voz alta pude sentir lo que tú, las nubes ante ti rozando tu cabello ondulado. Cuando fue una lágrima la que recorrió tu mejilla, mi corazón simplemente se paró, pero cuando te ví vivir, yo amé la vida.

Ahora no te veo reir, ni mirar ni ver. No veo ni tus ojos ni tu mirada, ni una lágrima ni tus mejillas sonrosadas por un piropo mientras escondes en tu media sonrisa un "Te quiero". No escucho tus sueños salidos de tus labios y veo, eso sí, que esa vida se ha congelado en medio del invierno. Pero este corazón late aun por lo que sintió y desea volver a verte reir, mirar, soñar, vivir... Y espera paciente un momento, tu momento, para poder volver a querer como una vez lo hizo, como lo hace en realidad hoy en las sombras, aguardando el momento para derretir el invierno del mundo y llegar al paraíso mutuo, calmado, cálido, eterno... Para poder amar la vida, tu vida, la mía. ***

 

viernes, 10 de enero de 2014

En soledad

Derramaba el café goteante de su cucharilla deliberadamente en el paño blanco de cocina que hacía las veces de mantel. Iba dibujando con manchas marrones lo que parecía tinta en un papel arrugado, salida de una estilográfica Parker 45 de los años sesenta. Los sesenta... Qué tiempo tan feliz. Toda época pasada fue mejor, se decía.

Pensaba aún en el día que la muerte de Monroe conmocionó al mundo entero. Marilyn había marcado una etapa en su adolescencia temprana, al igual que la mayor parte de la música de su vida había salido de esa década prodigiosa.

Suena el teléfono. No lo coge. La válvula de la olla ha empezado a girar en la cocina. Son las dos y diecisiete. Tiene media hora más para seguir observando las gotas de café tardío mezclado con melancolía, hasta que el Lg Optimus le marque con la alarma el momento de retirar el guiso de la vitrocerámica. No le hace gracia tener que cocinar, no es de sus tareas favoritas. Podría ponerse a planchar, piensa. Planchar no le pesa.

Suena de nuevo el inalámbrico, se levanta con gesto airado y antes de descolgar parece escupir una palabra malsonante mientras se dirige a la ventana abierta. Al cabo de poco, la expresión sombría le cambia. Al final, un simple acto es capaz de cambiar su ánimo. Sopla una brisa que se cuela a través de la cortina y le roza las ojeras. El día se torna soleado y huele como nunca a comida, a nubes, a yerba fresca recién cortada del jardín de su calle. Puede que no sea la mejor etapa, pero hoy, por sus narices, no habrá lugar para los malditos.

 

sábado, 4 de enero de 2014

No dejes de soñar

"Cuando preguntes el porqué, comienza por pensar el ti. Cuando te olvides otra vez, empieza por quererte a ti y cuéntame (puedes contar conmigo a cada paso), escúchame, te escucharé... Porque la vida tuya es y siempre tienes que luchar. Y a veces tienes que perder para luego poder ganar, para sentir, para vivir, para soñar..."




Un aplauso al que escribió esto.